La intensificación de las obsesiones y las compulsiones, el aislamiento social o una experiencia dolorosa, pueden derivar en estados de depresión y un sentimiento de desesperanza que parecieran no tener solución.
25%
de los pacientes con TOC han pensado o intentado suicidarse
indicios de
un posible
SUICIDIO
Hay una serie de señales de advertencia que podrían indicar que alguien está pensando en hacerse daño.
entrega de
posesiones
Regalar nuestras posesiones más preciadas a amigos o familiares.
sentimiento de
desesperanza
Hablar abiertamente de sentirse desesperado, indefenso, o que «no pueden soportarlo más».
hablar sobre
muerte
Cuando alguien habla constantemente de la muerte, aunque esté fuera de contexto, o manifiesta abiertamente tener ideas suicidas, puede ser una forma de pedir ayuda.
cambios en el
comportamiento
Actuar de forma imprudente, impulsiva y temeraria, o pasar de un estado melancólico a uno alegre y eufórico sin razón aparente.
síntomas de
depresión
Alejarse de los demás, llorar todo el tiempo, perder el interés en aficiones o actividades, perder el sueño y el hambre, son indicios de una fuerte depresión.
cómo ayudar a
un posible
SUICIDA
Existen diferentes acciones que familiares y amigos pueden realizar con el objetivo de ayudara un paciente en crisis.
constante
comunicación
Mantener la comunicación y hablar abiertamente de lo que la persona está sintiendo y pensando.
no tener miedo a
expresarse
Expresar sin miedo que se está preocupado por el bienestar de la persona.
nunca dejar de
preguntar
Preguntar directamente cómo y cuándo piensa hacerlo.
manifestar
empatía
Mostrar empatía y no minimizar lo que la persona está sintiendo o pensando.
búsqueda inmediata de
ayuda
Buscar ayuda de médicos, familiares u otras autoridades.
“ Muchas de las personas que sufren TOC, pueden llegar a un nivel de depresión tan alto y sentirse en un túnel sin salida, que pueden fácilmente pensar que la forma más fácil de terminar con esta gigantesca aprensión, es el suicidio. De hecho, yo he tratado en mi vida de suicidarme aproximadamente seis veces y afortunadamente sobreviví. Otros no lo han logrado y son parte de una estadística más. No quiero que eso les pase a más personas y tampoco quiero que sus familiares sufran tan grave pérdida.”